Azai Abraham: si pudiera me comería 400 helados

Hijo de Andy y Sherelyn. El más pequeño de los hermanos Aparicio Jiménez. Sus padres eligieron nombrarlo Azai por su raíz  tailandesa, cultura con la que se identifican, también por su significado «Hombre Valiente.» Abraham es su segundo nombre, su fundamento es bíblico y quiere decir “Padre de Multitudes”. Su mami cuenta entre risas que primero creían que sería una niña y habían comprado todo rosado, casi con 9 meses de embarazo tuvieron que cambiar todo. Tiene 7 años y ya está en 3er grado. Le gusta jugar con su hermano mayor  y también dormir con el sabroso frío bogotano.  Le encanta ir a su colegio y allí se porta muy bien. Dice que le gusta ver películas de terror y cuando se le pregunta si no le da miedo responde: !No! Yo soy muy valiente. Asegura que le gustan muchísimo los dulces y sus chucherías favoritas son las papas, las gomitas y las chupetas. Le gusta mucho comer pizza y hamburguesas, también las fresas con chocolate. En el colegio le gusta la matemática, pintar, leer y también dibujar. Ama a los animales, no puede elegir solo uno, así que sus favoritos son: oso pardo, oso polar, oso panda, león y pantera. Le gusta estar con su familia, ama cuando ven películas y juegan juntos. Cree que algo que lo hace muy especial y diferente es que en el colegio siempre habla con sus compañeros. además sus maestras  dicen que se porta bien y que hace las tareas rápido. Nos da entrada a su pequeño corazón y a sus ideas, así retomamos los relatos de Extraordinario Soy este 2022.

Sherelyn, su madre, habla con amor y admiración de ese pequeño que tanto refleja de ella misma en su físico y en su forma de ser. “En su personalidad y carácter es muy parecido a mí, es un niño cariñoso, un poco tímido, ama la naturaleza y a los animales, siempre ha tenido mucha compasión por los perros de la calle y se preocupa mucho por las plantas. Ama los videojuegos y ya dice que quiere crear su canal de Youtube para grabar y transmitir videos. Él siempre dice que su mayor miedo es perder a su familia, tiene una conexión muy especial con su hermano, duermen acurrucados y si uno se despierta primero que el otro, la regla es que no se pueden levantar de la cama hasta que ambos estén despiertos. Se porta muy bien siempre y cuando tenga alguna pantalla en frente, cuando no es así, hace travesuras como todos los niños. Es responsable con su cuarto pero a veces le da mucha flojera recoger los juguetes y su ropa. Hace sus tareas juicioso y con entusiasmo de aprender mucho. La anécdota mas relevante de Azai es que según era niña hasta que cumplió 8 meses de gestación, los médicos me aseguraron que iba a ser niña, obviamente compramos todo rosado y ya cuando casi cumplía 9 meses me dijeron que es un niño y tuvimos que cambiar todo lo que habíamos comprado (risas) ”.

Andy es su papá y cuenta con todo su cariño a Azai. “Es un ser humano con una dulzura infinita hasta en las situaciones más complicadas siempre está con la ternura a flor de piel pero también es la travesura personificada tiene el poder de hacerte sentir bien en cualquier situación. Es muy inteligente más de lo que él mismo cree. Estoy agradecido con la vida por dejarme ser su papá, él y yo somos realmente cómplices en muchas cosas, es mi compañero de películas aunque se duerme primero. Es mi discípulo malévolo para molestar a su mamá o a su hermano. Es mi felicidad cuando quiere aprender habilidades nuevas. El primer día de clases este año, Azai estaba muy nervioso porque por primera vez se iba solo en un transporte a su colegio, cuando la ruta escolar llegó a buscarlo estaba vestido y listo pero casi con las lágrimas en los ojos, salió haciéndose el fuerte se subió a la ruta y me dijo papi te amo, se sentó y aún aguantando las lágrimas disimuló todo el tiempo hasta que la ruta arrancó. Cuando volvió lo abracé y le pregunté : ¿cómo te fue papi? Y me dijo: excelente papi me gustó el colegio, solo que no quería que me vieras llorar porque yo soy fuerte. Mi amor por él es inquebrantable”. 

Para conocer mejor su historia, breve en años pero extensa en simpatía, le preguntamos algunas cosas interesantes y divertidas:


¿Qué recuerdas de cuando eras más pequeño? 

“Que tenía el pelo con rulitos y me gustaba mucho ver películas”.


¿Cuál color te gusta? 

“Me gusta el azul, el naranja, el rojo y el amarillo”.


¿Qué es la familia?

“Es aquella que nunca te traiciona”.


¿Qué sientes por tu familia? 

“Mucho amor”. 


¿Cómo es tu mami?

“Muy buena conmigo, sabe mucho lo que me gusta, lo que me gusta comer y siempre me compra dulces”.


¿Qué te enseña tu mamita? 

“Me enseña a no portarme mal, me enseñó a amarrarme los zapatos, cómo escribir y cómo leer”.


¿Qué me puedes contar de tu papá?

“Se porta muy bien con nosotros, nos invita a jugar play y también nos ayuda cuando no sabemos algo”.


¿Papá qué te enseña?

“Me enseña a defenderme pero también que yo no tengo que empezar las peleas tengo que terminarlas, también a leer y a jugar play”. 


¿Cómo es tu hermano mayor? 

“Akany es muy bien portado. A veces me cocina el desayuno, me hace sandwich y me sirve el cereal y el jugo. Juego con él, también a veces salgo a comprar cosas con él y siempre juego play con mi hermano. Me ayuda a hacer la tarea y me ha enseñado que no tengo que tenerle miedo a nada”.


¿Qué recuerdas de Venezuela? 

“Me acuerdo que yo iba a veces a la casa de mi tía Helen y jugaba con mi prima Andrea. De Venezuela he escuchado que Maduro es muy malo y que ya están mejorando las cosas allá”.


Cuéntanos de tu familia en Venezuela

“Yo siempre hablo con mis abuelos cuando mi mamá está en videollamada con ellos y me gusta muchísimo hablar con ellos, me saludan y también me dicen cómo me estoy portando y después llaman a mi hermano. A veces también hablo con mi tía Helen y me dice que cómo estoy y cómo me estoy portando y veo a mis primos Andrecito y Josue”.


¿Con cuales personas compartes más?

“Con mi tío Henglebert, mi tío Franco y mi amigo Irving, es pequeño tiene solo 6 años. Mis tíos me enseñaron a jugar basquetbol”.  


¿Por qué crees que vamos a la escuela?

 “Para aprender”.


¿Cómo es tu colegio?

“Mi escuela se llama Tom Adams y me gusta ir, siempre me porto bien, nos enseñan a hacer figuritas con papel, a pintar, a escribir y a leer. 


¿Cual es tu juego favorito?

“Las atrapadas que son cuando un niño persigue a otro niño y si lo atrapa gana”.


¿De dónde venimos los seres humanos?

“De Adán y Eva”. 


¿Qué quieres ser cuando seas grande y por qué?

“Bombero porque me gusta el fuego y me gusta el calor, también me gusta escalar y ellos ayudan a bajar a las personas de lugares altos con sus escaleras”. 


¿Cuáles son las normas que hay en tu casa?

“Portarnos bien, siempre arreglar nuestro cuarto y barrerlo”.  


¿Qué te da miedo?

“ Los truenos y la lluvia”.


¿Cuál superpoder escogerías si pudieras tener uno?

 “La super fuerza para ser muy fuerte, también volar y teletransportarme”.


¿Cómo son los adultos?

“Son muy responsables de los más pequeños”. 


¿Qué consejo le daría a los más grandes?

“Que siempre cuiden a los niños”. 


¿Cuántos helados te comerías si pudieras?

“Me gustan mucho los helados, en mi colegio venden helados frente a la puerta. 

Me comería 400”

 

¿Y si te duele la panza por comer tantos helados?

“No porque la mitad se la daría a mi hermano, pero mejor compro 800 y le doy 400 a mi hermano y 400 para mí”.


Para ti ¿Qué es el amor ?

“Cuando una persona tiene novia”. 


¿Cómo ves el futuro para ti y tu familia?

 “Quiero que mi casa sea más grande y que seamos millonarios”. 


¿Qué haría del mundo un lugar mejor?

“Que las personas no tiren basura al piso y que las personas paren de hacer cosas malas como robar bancos”.


Si pudieras viajar a un mundo mágico ¿Cómo sería?

“Tendría muchos dulces y nunca llovería y yo regaría las plantas con jugo de guayaba porque ese me gusta mucho.”


Para cerrar les cuento que Azai para mí es muy tierno, habla con mucha inocencia y dulzura, es todo corazón, es sensible y cariñoso. Recuerdo con claridad el día que vino al mundo, que Dios bendijo nuestras vidas con su llegada: nuestro encuentro primero fue ese mismo día, no podía esperar. Fue allí en la Maternidad Santa Ana donde nació, me emocioné infinitamente al sostenerlo entre mis brazos  era tan pequeño, rosadito y perfecto, desde entonces se me pareció tanto a su mamita Sherelyn, mi amiga querida y de tantos años. Me honra inmensamente que ella y Andy me hayan elegido como su madrina, también me entristece a veces estar tan lejos de ellos ahora, pero luego recuerdo que el amor no se muda y siempre nos valemos de la tecnología y justamente de ese amor mutuo para seguir en contacto. Somos familia de corazón, esa que afortunadamente sí, podemos elegir.  A mi niño Azai espero volver a verlo antes de que crezca demasiado como para poder cargarlo y dejarse apapachar por su tía-madrina, quien siempre lo lleva en el corazón y le desea amor y bendición. 

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