
Es muy hermosa, tiene el cabello preciosamente
ondulado y negrito azabache. “Mi nombre me lo puso mi papá porque en alguna vez
lo escuchó y dijo que se lo iba a poner a su hija.” Se lo agradece pues le
gusta y mucho más que Zuleima, nombre que había considerado su mamá. Adriana, de
origen latino relacionado con el amor y la entrega significa
mujer del mar. Isabel la nombró su madre en honor su abuela materna, ella le hereda
a su hija una forma similar: Isabella. De los posibles significados del nombre
Isabel, le agrada aquel que refiere: ama a Dios. Le gustan mucho los perros y
siempre ha tenido alguno. Cocina sabroso y es buena para escuchar, esas dos
virtudes armonizan sublimemente con su empatía hacia los demás. Nace en
Caracas, en mayo como cualquier flor bonita. Vive la mayor parte de su vida en
Acarigua, de adulta retorna a su ciudad natal y luego se va a Chile donde
reside actualmente. Comparte el rol de mamá con su trabajo y una pasión
recurrente: pintar.
Se
define como una persona sensible, sentimental y tranquila. “Qué difícil es
definirse a uno mismo, porque siento que estoy clara de quien soy pero capaz
las personas que están a mi alrededor me pueden definir mejor. Soy cariñosa,
independiente, capaz, inteligente y bella. Hay mucha gente que me dice que soy
luz y sí soy luz.” Admite llorar por casi todo, de rabia, de tristeza y de
felicidad. “Lloro por todo menos por un dolor físico, siento que si lloro me va
a doler más.” ¿Qué te hace reír? Tú y
tus preguntas me dice y se ríe. “Ver a María a mi lado y que esté sana me hace
feliz. Estar cercar del mar y ayudar a los que necesitan me hace feliz.” ¿Qué
es lo primero que ves en otras personas? “Que sean sinceras indiferentemente de
lo que sean y estén pasando, que sean sensibles, una persona fría no me
agrada.”
Todo
lo que es morado le parece bonito, le gusta mucho ese color. Para la comida
dice ser medio chanchita porque todo le gusta. “Lo que más me gusta es la
pizza, aunque la verdad lo que más yo amo en mi vida es el pollo de Arturo´s,
he sufrido este tiempo de mi vida sin poder comerme un jumbo.” De las fruta
delira por comer patilla y tomar jugo de parchita. Le gusta comer helado de
Chocolate y Fresa como el tornado de Arturo´s. Cuenta que al radicarse en el
Sur aprendió a tomar vino. Crecer en un lugar caluroso como Acarigua afinó su
gusto por las bebidas frías. “Siempre he sido muy mala para tomar bebidas
calientes. Ahora soy más de tomar café y mate, por las bondades que tiene. Pero
incluso en invierno igual me gusta tomar bebidas frías. Soy tan complicada para
tomar algo caliente que no me gusta la sopa.”
Coldplay
es el grupo qué más le agrada pues gusta de la música en inglés entre pop y
rock,
privilegia la música alternativa pero varía su escucha musical. Después
me indica su lista de reproducción: Bomba Estéreo, Monseiur Periné, Amigos
invisibles. En chile ha conocido nuevos grupos cómo: No te va a gustar, Auténticos
decadentes y Las pastillas del abuelo. El único libro que se ha comprado se
llama En un instante. Normalmente le gusta el 6 y los números pares: 2, 4, 6 y
8. Siempre ha gustado de vestir relajadamente, mono, franelita y unos zapatos
deportivos. Nunca ve noticias y su película favorita es Como si fuera la primera vez. “En realidad me encanta Adam Sandler.
También la saga de X-men, en general me gustan las románticas y las comedias.
Hasta ahora de las series que he visto la que más me ha gustado es Vikingos.”
¿Playa
o montaña? “La playa me gusta más, de hecho vivo frente al mar. Pero muy rudo no
poder bañarme porque es muy frío, más para nosotros que estamos acostumbrados a
llegar a la playa y meternos de una vez, nada como el mar Caribe.” ¿En qué
lugar te gusta estar? “En un lugar sereno, no me gusta el alboroto, siempre con
las personas que quiero y escuchando música suave.” ¿Frío o calor? “Prefiero el
calor siempre, a mí me encanta la lluvia, el olor a tierra mojada me gusta, me
recuerda mucho a mi papá, él se paraba de madrugada a regar en el vivero, me
despertaba creo que por el olor a tierra mojada. Me gusta ese fresquito y el aire
acondicionado para combatir el calor de Acarigua, pero desde que vivo aquí no
lo prefiero tanto, porque hace mucho frío.” ¿Qué día te gusta? “Antes me
gustaba más el sábado, pero después de cumplir 30 he cambiado tanto, siento que
soy otra persona. Ahora mi día favorito es el lunes, al ser el comienzo de
semana, pienso que es un nuevo inicio, me levanto a estructurar la semana y
pensando que todo va a estar bien. Todo el mundo siempre dice que va a empezar el
gimnasio, la dieta o algo y siempre cargamos esas retahílas de cosas pendientes
para los lunes.”
Recuerda
bonito su niñez. “He sido tan perdida del mundo siempre que tengo una anécdota
de chiquita: mi mamá siempre trataba de que yo analizara las cosas que
investigaba, nunca fui de leer y leer, sino de tratar de interpretar. Mi mamá
me pregunta Adriana ¿Qué es el medio ambiente? es todo lo que nos rodea, como
el amor, la paz y la alegría.” Un grato recuerdo familiar es que viajó a Europa
con sus padres y su hermano Manuel. “La verdad agradezco todo lo que he vivido
he tenido mucho y poco, desde estar en La Torre Eiffel hasta tener que bajarme
rapidito de una camionetica porque no tengo pasaje. Fui a España, Francia,
Portugal y Alemania y visitamos a la familia. Ese viaje fue muy icónico porque
justamente me desarrollé en plena Torre Eiffel, la fecha fue inolvidable 09 de
agosto del 96, tenía 10 años. Siempre he agradecido a Dios por todo, creo que
la gratitud ha sido la clave de mi andar.”
Pensar
en Agua Blanca le trae gratas memorias, recuerda trabajar con su abuela
asistiendo a personas necesitadas. “Ese sentir siempre de querer ayudar a los
demás se lo agradezco a ella y eso ha bendecido mi vida.” Allí participó en un
grupo de la iglesia hacían mimos, coreografías y obras de teatro. “Recuerdo
especialmente cuando se hacían jornadas para limpiar la iglesia, lavábamos todo
con jabón y echábamos bastante agua, nos tirábamos y jugábamos en el piso, era
agradable para combatir el calor tan fuerte que hace allá. Esta época la menciono más que todo por mi
abuela, me hace pensar en ella y en el legado que nos dejó.”
Revela
su certeza espiritual. “Siento que mi vida espiritual ha cambiado mucho, he
aprendido a ver a Dios como ese amor y pasión que sientes cuando haces algo que
te gusta, esa voz de tranquilidad y a la vez esa espinita que te dice: ¡muévete!
Crecí formada en el evangelio, estudié en un Colegio Adventista donde hice muy
buenos amigos, luego en mi búsqueda de saber más, hice cursos de crecimiento
personal y meditación porque siempre me ha gustado los procesos de la
consciencia y todo lo que tiene que ver con ello. De niña
quería ser psicóloga. Hice temazcal que es una técnica ancestral de meditación
y medicina indígena. Todo eso me ha llevado a una conclusión: agradecer.”
El
negocio de sus padres por muchos años fue un vivero así que creció muy
vinculada a la naturaleza. “Desde chiquita he estado siempre relacionada con
las plantas, crecí prácticamente dentro de un vivero, siempre que voy por la
calle identifico a las platas como si fuesen personas, me sé todos los nombres.
En estos días fui a un vivero y me sentí como si ya hubiese estado ahí, las
plantas están presentes toda mi vida, es cómo si las conociera desde niña. A
todos nos quedó algo de eso, mi mamá con la grama y el paisajismo, Manu con los
bonsái, yo con las flores y pintar materos que es algo que me encanta y mi papá
con un poco de todo, pues es quien más sabe, y nos enseñó todo al respecto. Aunque
hemos estudiado o hecho cosas diferentes siempre terminamos vinculándonos con
algo de las plantas y la naturaleza en sí.”
Repasa
su infancia y memorias con sus padres. “Mi papá en mi vida ha significado
muchas cosas, lo recuerdo y es revivir ser pequeña, cuando era hija única, mi
hermano Manuel nació cuando yo tenía 6 años. Mi papá es como esa conexión de mi
yo pequeña con la mujer que soy ahora a mis 34 años. Dejamos de vivir juntos cuando
tenía 15 años y fue justo iniciando ese tránsito a mujer que es tan complejo. Soy
la mayor de las hembras de los 7 hermanos que somos, de mi papá y mi mamá somos
3 y mi papá tuvo 4 más. De mi mamá recuerdo mucho cuando estaba chiquita, para mí
siempre ha sido la mujer guerrera, que le echa pierna a cualquier cosa, hasta a trabajos de hombre, me ha enseñado a luchar y
seguir adelante siempre. Recuerdo mucho el compartir que tuvimos en México, fue
por ella que estuvimos allá y fue un tiempo muy bonito.”
Entre
esos relatos redime los que comparte con sus hermanos. “Cuando necesitaba
hablar con alguien, un consejo o desahogarme siempre fue con Manu, y eso que es
menor que yo. Siempre ha sido mi bastoncito, yo creo que es la persona en el
mundo que mejor me conoce. Alejandro para mí sigue siendo un niño a pesar de
todas las cosas que ha vivido, para mí es un niño tremendo y una persona osada,
he aprendido a respetar lo que él decide vivir. Ellos y mis papás para mí
significan unión, siempre hemos sido unidos, aunque estemos lejos y pensemos distintos
sabemos que siempre vamos a estar el uno para el otro por sobre todas las
cosas.”
Zulay
su mamá me cuenta que tenía fecha de parto para el 29 de abril pero se tardó
unos días más y nació el 3 de mayo. “Desde niña ha sido leal y comprometida, se
dejó enseñar. Ha sido para mí una amiga incondicional, nunca me ha dejado sola.
Me ha dado un ejemplo inmenso de amor de madre por su historia con María
Isabella, por la entrega y la madurez con que pudo salir triunfadora de todo.
Siento que es una mujer empoderada y segura que ha enseñado muy bien a María
unos valores inmensamente hermosos, esa niña es lo que es por las enseñanzas
que su mamá le ha dado. Adri ama mucho a su papá y a mí también me ha mostrado
amor incondicional. Toda la vida ha seguido mis consejos, los pone en práctica
y creo que por eso le ha ido bien. A veces le da miedo enfrentar cosas pero afronta
ese miedo y al final logra su propósito. Siento que si no tuviese a Adrianita
aquí a mi lado ahorita, me sentiría desamparada, teniendo en cuenta que mis
otros dos hijos han sido muy independientes, ella siempre ha estado conmigo,
pendiente de mí, en mis decisiones y procesos de vida, me ha apoyado y me ha
aconsejado. Yo la amo y hoy por hoy la admiro grandemente, muchas personas me
dicen de la belleza que tiene y eso hace que yo me sienta muy orgullosa de la
hermosa mujer que es. La amo con todo mi corazón y espero lo mejor para ella y
María Isabella toda la vida.”
Manuel
su hermano la reconoce como una persona influyente en su vida y muy especial
para él. “Siempre ha sido mi mejor amiga, además de yo abrirme con ella,
también ha sido totalmente transparente conmigo, me ha contado todas sus cosas,
sus intimidades, momentos alegres y también los tristes. Me enseñó cómo tratar
a una mujer. He querido estar presente siempre en su vida para poyarla así como
ella me ha apoyado a mí, a veces he podido y otras no, pero hago todo lo
posible para que sepa que puede contar conmigo ya que siempre he contado con
ella. Adriana estuvo para mí en toda mi infancia, yo casi siempre le digo mami,
yo recuerdo que incluso cuando estaba en quinto grado me despertaba, y yo
estaba flojeando siempre en la cama, todavía sin ganas de pararme por el frío
y Adrí me planchaba la camisa y estaba
calientita me acuerdo y me vestía, ¡Me vestía! Yo acostado así todo dormido,
flojo como siempre, y ella me ponía las medias, la camisa, los pantalones y
todo mientras estaba entre dormido. Me despertaba cuando ya estaba listo para
irnos y ese es uno de los recuerdos más importantes que tengo con ella. La amo
y es para mí un ejemplo de inocencia, aunque es mi hermana mayor yo siempre la
voy a ver como una niña inocente. ¡Siempre hemos sido los mejores amigos!”
Adriana
también recuerda mucho de su familia en su niñez y especialmente su tía Yuli.
“Pensar en ella es como ser niña otra vez, mi tía para mi es mi mejor amiga, es
la que siempre me escucha, me enseñó la tabla del 6 y a multiplicar. Creo que
por eso soy así con Almary. Porque nunca había tenido una hermana menor hasta
ahora que tengo dos pequeñas pero fue con ellas que compartí tantas cosas
lindas.” Se entiende a sí misma y a las mujeres de su familia como
maravillosas. “Siento que las mujeres somos únicas, no se trata de ser iguales
porque somos diferentes, somos inteligentes y capaces. Viendo en este punto,
estoy muy agradecida de la familia que Dios me regaló, siempre fui tan cuidada
y protegida, por todos y especialmente por los hombres que tuve a mi alrededor.”
Relata
su experiencia materna. “Mi historia como mamá es bonita ahora, estoy viviendo
las bondades de todo aquel proceso difícil. Mi hija es prácticamente un
milagro, nació a las 28 semanas, duró 2 meses en incubadora ypara los médicos
no había más nada que hacer sino esperar. En ese tiempo no entendía bien que pasaba
pero conectaba con mi fe y sabía que la última palabra la tenía Dios, le dije
si ella va a ser una niña feliz y sana que la dejara conmigo y si no, que le
permitiera descansar. Yo necesitaba una respuesta, fue como me la dejas o te la
llevas, sabía que ella merecía trascender. Al día siguiente todo comenzó a
fluir y voilà a los días me la dieron y pudimos ir a casa. Creo que luego de
esto me gradué en fe y bueno está claro que mi retoño es un personaje, es decir
que el universo entendió claramente mi mensaje,
y bueno es otro motivo para agradecer, de hecho lo que no sé es que hice
para merecer que ella saliera de mí, es mágica y sé que todos los que se han
cruzado en nuestra vida opinan lo mismo. Ella y Manu han sido mis maestros todo
este tiempo.”
Le pido a María Isabella, su elocuente hijita,
que me cuente sobre su mamita y me responde: “¡Ay a mi mamá le va a encantar!
Me gusta que es ordenada, siempre está pendiente de mí y de mis cosas. Algo que
me encanta de ella es que es una gran pintora, de hecho creo que sus dibujos
deben estar en una galería porque pinta precioso. ¿Sabes la historia de Frida?
Pues así es mi mamá una gran pintora y me gustaría que su casa se vuelva una
galería como
la de Frida. Duermo con ella y me gusta que cuando me despierto me da besitos y
me consiente. También me gusta que trabaja mucho para comprarme lo que yo
necesito porque no todo es gratis. Me gusta cómo me cuida y cuando leyó mi
cuento de Olena, le fascinó y hasta lloró un poquito. Si miento ella sabe, si
le estoy escondiendo algo de una vez le suena el detector de secretos ¡tututu! Algo
esencial de mi mamá es que yo creo que es como mi campo de fuerza, trata de
ayudarme siempre. Lo que más me gusta es verla feliz, yo creo que mi mami es
una guerrera triaris porque ha luchado con varias cosas y aun así siguió
adelante. ¡Yo la amo mucho!
Adriana
me declara: “Lo más extraordinario en mi vida es María Isabella y ser mamá, no
sé cómo explicarlo pero es mágico. También el hecho de haberme mudado a Caracas
le dio un vuelco a mi vida, todo comenzó desde que me fui de Acarigua, desde
ahí han venido muchas transformaciones. Ha sido todo un proceso de cambios
extraordinarios, desde que cumplí 30 años y con eso de mudarme, ahí comenzaron
muchas cosas buenas para mí. Disfrutando
lo que tengo camino a donde voy es una frase que escuché, aprendí y así lo aplico
en mi vida siempre. Le gustaría ser recordada como una persona carismática que
mientras pudo ayudó a los que estaban a su alrededor y como alguien
comprometida y feliz. También como una excelente madre, que siempre estuvo ahí
para su amada Isabella.
Adriana
vivió en México cuando tenía 17. “Hice buenos amigos con los que mantengo
comunicación porque pienso volver.
Estuve en un Cervantino una de las experiencias más bonitas de mi vida.”
Ahora mismo vive en Concón- Chile, llegó decidida pero al mismo tiempo sin
saber que iba a pasar. “Dios me bendijo una vez más con mi trabajo que ha sido
la base para poder estar bien aquí. He aprendido muchas cosas, he compartido
con gente muy bonita, he experimentado muchos cambios que me confrontan con mi
existencia, por momentos me he sentido presionada con la responsabilidad y el
trabajo, y otras veces he hecho cosas impulsivamente como irme a las dunas por
la noche. Lo más radical que he hecho en Chile es que me tatué y me rapé una
parte del cabello, un corte que siempre había querido y nunca me había hecho.
Yo misma soy mi estilista me corto el cabello, me lo pinto, me arreglo las
cejas, me las desarreglo y así voy. No me gusta usar carteras, no me gustan los
zapatos altos. No me gusta comprar ropa, no me gustan las peluquerías en ese
sentido no soy tan femenina.”
El
año y medio que lleva en Chile ha sido una experiencia vital significativa.
“Trabajo mucho en casa pero aquí también he aprendido que más allá del deber
existe un tiempo para entretenerme y relajarme. He disfrutado estar aquí en
Chile con mucha gente nueva y agradable, como Pablo que me ha motivado a
apreciar este tramo de mi vida, recrearme, conocer nuevos lugares y que no todo
es deber. He aprendido a sacar tiempo para mí, entiendo que merezco disfrutar,
compartir y crecer. Lo que puedo decir que más me enamoró y me sigue enamorando
de Chile son los atardeceres de otoño, es mi estación favorita del año. Pensé
que me gustaría más la primavera por las flores y las plantas que me gustan
mucho, pero amo el otoño.”
Destaca
que lo primero que hace al despertar es asomarse por la ventana para fijarse si
va a salir el sol, desde que vive en Chile está muy pendiente del clima. “También
me quedo un rato con María abrazándola, en esos 20 minutos aprovecho de
disfrutarla, porque luego el día con la rutina se nos pasa volando. Después reviso
las redes sociales y ahorita hago ejercicios un rato. Siempre a las 6 de la
tarde saco tiempo para compartir juntas, salimos a caminar un ratito, a comer
algo, pasear a la perra o comer un helado, pero aprovechamos de disfrutar ese
rato.”
Un
amigo canino ha sido una constante en su casa y en su vida. “De pequeña siempre
hemos tenido perro, creo que eso nos lo enseñó mi papá, nosotros tuvimos en el
vivero de todo tipo de animales, en especial perros. Me gustan mucho tengo
mucha conexión con ellos. Recuerdo mucho a Congo que fue un perro de Manu pero
tuvimos una conexión muy especial, tanto que todavía lo lloro. Nosotros
teníamos muchas ganas de tener un perrito aquí y nos conseguimos a Cherua que
en piaroa significa no sé, como no sabíamos de donde venía ni nada de su pasado
le pusimos así. La rescatamos de la calle, nos la quedamos y todos saben que es
una perrita muy especial, siento que es perfecta para mí.”
¿Eres
feliz? “Sí porque decidí ser feliz, no porque no me duelen las cosas o porque acabaron
las complicaciones a mi alrededor, decidí ser feliz, si no puedo aportar o
resolver a un problema sigo de largo, para que me voy a quedar ahí ¿Y entonces?”
Un estado de tranquilidad, esa satisfacción de estar en conexión directa con
tus sentimientos internos, cuando estás satisfecho con lo que estás viviendo y alineada
con tu ser, para ella eso es la paz. “El amor, es cuando das sin esperar nada
cambio. Sentir lo que las personas a tu alrededor sienten y acompañarlos en
todo momento, tanto en la felicidad como en la tristeza. De hecho, tengo una
teoría de que no hay que celar ni obligar a nadie, el que quiere estar va estar, tanto en el
amor como en la amistad, va a estar
quien disfruten mi compañía y estar conmigo. El amor es recibir, nadie
da lo que no tiene. Siento que lo que doy se multiplica en mí, lo que
tú das es lo que más se multiplica en ti, por eso debemos estar pendientes de
qué es lo que estamos dando, eso florece a nuestro alrededor.”
¿Algún
pendiente con la vida? “Diría que irme de viaje y conocer muchos lugares, lo
haré cuando Maria sea grande e independiente, no quise tener más hijos, decidí
tener una a quien dedicarle todo mi amor de la mejor manera posible. Quiero que
sea excelente y sentir que aporto a través de ella más que cantidad, calidad a
este mundo que tanto lo necesita.” Adri piensa que ahora mismo está floreciendo
personalmente como resultado de todo el proceso que ha vivido. “Hay una imagen
que empleo para definir mi proceso y el de muchas personas, es un unalome,
tengo un trabajo que al principio fue difícil adaptarme, pero
independientemente de la pandemia siempre lo hago desde casa, agradezco mucho y
estoy tranquila tengo tiempo para estar con mi hija, siento que estoy viviendo
un mundo paralelo al que vive la gente afuera pues sigo en mi rutina habitual.
Retomé pintar mis materitos que me gusta mucho, estoy relajada y disfrutando el
momento, sé que como Dios cuida de mí van a llegar puras cosas buenas para mi
vida, y si llegan cosas para aprender también serán bienvenidas porque todo nos
hace crecer.”
Adri
y yo siempre hemos hablado mucho, aunque a veces pasemos tiempo hacerlo, la
charla se retoma como si culminó ayer. En esta entrevista es graciosa como
siempre, nos reímos mucho, invariablemente ha sido así. Me complementa sus
respuestas anteriores cuando vamos por otra pregunta y me dice que lo recuerda
de pronto. Me resulta bastante analítica y toma su tiempo para contestar,
afirma que siempre ha sido demasiado empírica para todo. Hemos compartido
muchísimas aventuras, en nuestra familia había que cargar lo mismo un traje de
baño que un suéter, “uno sabe para dónde va pero no a donde llega” Adri me
recuerda que así decía Yeli, nuestra querida tía.
Recuerdo
que nuestro cabello llamaba mucho la atención, casi siempre lo hemos usado
largo, ella más que yo, aunque recientemente se hizo un corte radical pero solo
lateralmente así que mantiene su poblada melena. El de ella es negro
naturalmente y yo me lo pintaba igual, el mío es liso y el de ella rizado, muy
hermoso, son unos excelentes rizos para publicitar algún producto de cuidado
capilar. La cosa es que eso de la
hermosa cabellera es la máxima representación de lo diferente que podíamos ser
la una de la otra, pero justamente podría representar el vínculo descomunal de
una amistad que nos vino de nacimiento. Se me adelantó 4 meses en llegar al mundo, de resto fuimos
contemporáneas en tanto.
Atesoraré
de por vida su enunciado: “Imposible que me olvide de ti porque María es
idéntica, si hubiese sido hija tuya no se hubiese parecido tanto.” Yo veo en
esa princesa tanto de mí, pero también reconozco muchísimo de ella. Me remonta
a nuestra infancia feliz jugando, cantando y brincando. Los acuerdos no
necesitaban tinta los sellábamos con saliva, aunque nos daba un poco de aversión.
Con inocente amor hicimos un pacto de sangre, nos cortamos levemente los
pulgares con una hojilla, los unimos y prometimos ser amigas eternamente. Fue
nuestro travieso rito para sellar la natal amistad de 2 primas que crecieron
como hermanas. Era casi una obligación contractual, actos afectuosos de esas
amigas inamovibles, esencialmente saber que contamos la una con la otra por el
resto de la vida.
Una
vez fue a visitarnos en Mérida, mi mamá me dijo que tenía una sorpresa en el
cuarto y cuando entré era ella. Recuerdo que nos abrazamos, saltábamos y
gritábamos de emoción. Pasé muchas vacaciones en su casa y jugábamos de todo,
ayudábamos a atender en el vivero y de adolescentes tuvimos nuestro propio
emprendimiento floral. Ambas siempre productivas y resueltas. No sé si se
acuerda de la vez los acompañé a La Guaira para ir a buscar a su abuelita que
llegaba de Portugal. Nos quedamos en hotel en Macuto y mi tía nos llevó temprano
a la playa, nos bañábamos felices de la vida en ese mar Caribe que nos resulta
tan lejano ahora.
Frases
como “sie cara” y ¿Y entonces pues? se me pegaron de ella. Siempre se quedaba
dormida mientras le contaba algo, entre que yo hablo mucho y ella se duerme
temprano, eso era lo acostumbrado. Viajamos, paseamos, nos enamoramos, reímos y
lloramos juntas. Fuimos y vinimos en su carro ¡Que buena vida nos dimos! Pudimos
ser niñas y adolescentes felices y a nuestras anchas. Íbamos al club luso y
disfrutamos muchas tardes de piscina, en la ida y el regreso escuchábamos
música a todo volumen: canciones de Shakira y de Fey, nos sabíamos en nuestro inglés
autóctono las canciones de Aqua. Comíamos donde Perete, en la arepera El Tren,
íbamos al cine Mamanico y ni hablar de un súper cyber donde nos la pasábamos,
me acuerdo que hasta acumulábamos puntos que podíamos canjear por horas, de
tanto que íbamos a conectarnos. Mi primer correo fue Hotmail, ella me ayudó a registrarlo
en Its Menú, la dirección fue una
combinación de mi nombre, el de ella y el de nuestro amigo Jonahir. Cabe destacar
todavía lo tengo aunque obvio abrí uno en Gmail.
Me acuerdo que aplicaba mis experticias de
mejor amiga cuaimatizada para aprobar a sus pretendientes y si alguno no me
agradaba se lo espantaba. La primera vez que fui a una disco fue con ella. No
logro recordar porque no pude ir a sus 15 años y ella no estuvo en los míos,
ahora imagino que no hay razón válida para tal desacierto, pero desde la
madurez entiendo que fueron cosas que no pudimos controlar. No es ninguna razón
escatológica ni de disputa familiar aclaro, solo que yo residía en Caracas y
ella en Acarigua. Propongo que la
próxima vez que nos veamos, descorchemos un buen vino y bailemos Tiempo de Vals como resarciendo aquella
ausencia, derrocando tanto tiempo y tanta distancia que no merece nuestra
amistad.
En
Caracas ya cerca de la migración de ambas pasamos bellos momentos juntas.
Fuimos a El Ávila en teleférico fue una tarde feliz paseo para nosotras y
nuestra muñeca. Nos fuimos de cocteles y karaoke, esa fue una gran noche para
ponernos al día con muchas historias pendientes. Siempre fuimos de cantar
karaoke, nos felicitaban y hasta ganábamos premios. ¡Imagínense ustedes! Ella
canta muy lindo, sobre todo La Playa
de La Oreja de Van Gogh. Cuando escucho Hoy de Gloria Estefan o Tabaco y Channel de Bacilos, se repite en mi memoria, con aquellas melodías cada
momento mágico de nuestra maravillosa amistad. Esa que me hace amarla y
llevarla conmigo siempre, las dos sabemos bien que uno no está donde el cuerpo
sino donde más lo extrañan y Arjona también. Insertaría risas acá solo para no
llorar porque somos bien lloronas, sentimentales pues, sabemos que ser amigas a
veces no fue fácil y nos costó tristezas pero en definitiva merece toda la
alegría. Mi Adri bonita Te amo siempre y profeso que no hay más pendientes entre
tú y yo que abrazos apretados, buen vino y mucho karaoke.
Mi linda Roys, gracias por conectarme con tantos momentos bonitos y mágicos, estoy en el punto exacto de la felicidad, llorando y riendo Jajajaja..
Gracias mil gracias al universo por tu vida en La la mía.. Te Amo infinito ♥️
¡Gracias a ti por ser parte de Extraordinarios! Me llena de amor y alegría tenerte por acá.
Extraordinaria es Adriana! Excelente redacción de quien es, su escénica y su personalidad!! Adriana es un Ser especial y bello!! Te amo ❤️
¡Gracias por todo y por leernos!
Todo el relato está muy bien escrito, y los detalles que te trasladan a los sitios. Pero la mejor parte fue la de María Isabella, que bellas palabras de una niña hacia su madre.
Ciertamente. ¡Gracias!
EXTRAORDINARIA ❤️?